Cómo proteger a tu mascota en invierno

A todos nos gusta el invierno pero es duro para todas las criaturas vivientes. Hay amenazas en las que nunca se puede pensar: desde garras cuarteadas en carreteras heladas hasta virus graves en el aire. A continuación se muestra la lista de los problemas más comunes que puede enfrentar como propietario de una mascota.

Las mascotas requieren nuestra constante atención y cuidado durante todo el año mientras recuerdas lo que Antoine de Saint-Exupery escribió una vez: "te vuelves responsable, para siempre, de lo que has domado". Como tenemos invierno ahora, no nos pongamos líricos y procedamos directamente al grano: ¿qué exige su atención especial en invierno para salvar a su mascota durante toda la temporada?

Peligro: frío general

Sí, hace mucho frío en los estados del norte. Hay razas que no necesitan largas caminatas como Chihuahua o Yorkie, por ejemplo. Solo pueden tener sus orinales en casa y hacer todas sus cosas vitales allí. Y aún más, es aún mejor hacerlo y no permitir que estos frágiles caninos salgan a resfriados extremos. Pero si tomamos, por ejemplo, Golden Retriever o Husky, necesitan caminar y correr algunas millas (especialmente Husky).

Solución: dado que no existe una solución para proteger las orejas y la nariz de su perro (al igual que para las personas), al menos puede comprar unos botines y abrigos para proteger el calor corporal de su perro y así evitar los virus. .

Peligro: aceras deslizantes

Tenga cuidado al llevar a su amigo de cuatro patas a caminar y dejar que se libere de la correa. Hay un número de situaciones que pueden salir mal y es posible que no tenga suficiente tiempo para responder: un automóvil accidental en la carretera y el perro que lo cruza puede convertirse en una tragedia si se encuentran; simplemente caer sobre el hielo puede hacer que la pierna de tu perro se esfuerce; etcétera etcétera.

Solución: Mantenga a su perro con correa apretada. Los entrenadores profesionales de perros también insisten en entrenar los comandos básicos de su mascota, ya que siempre puede haber situaciones en las que necesite restringirlo inmediatamente para evitar un contratiempo.

Peligro: calorías insuficientes

Por su propia experiencia, probablemente sepa que todas las criaturas vivientes necesitan más vitaminas en la estación fría debido a la constante pérdida de calor, la sequedad adicional y los inmensos virus en el aire. Tu perro no es una excepción. Para mantener su piel y su pelaje sanos y evitar cualquier enfermedad, debe cuidar a su compañero esponjoso.

Solución: enriquezca la dieta de su perro con croquetas secas o suplementos llenos de antioxidantes, proteínas, ácidos grasos, minerales, fibra, etc. Debe prestarse especial atención al aceite de pescado. Por supuesto, cada fanático de los perros conoce las notables propiedades del aceite de pescado o su sustituto (como el fitoplancton) que está lleno de omega-3.

Peligro: piel seca

El invierno trae sequedad adicional a la piel del perro.

Solución: en realidad, solo tiene que recordar tres reglas principales. Regla n. ° 1: no afeites a tu perro. Espere hasta que se vuelva más cálido en primavera o incluso en verano. Regla n. ° 2: cepilla a tu perro. Ayuda a deshacerse de la caspa y el cabello muerto. Regla n. ° 3: No laves demasiado a tu perro en invierno. Si ve que sus patas o barriga (o ambas) están sucias, use una toalla. La nieve se limpia tan fácilmente del abrigo como se lava.

Peligro: anticongelante y calentadores

Hay tan específicos de temporada para usar anticongelantes en autos y calentadores en casas que es mejor recordarles a todos sobre ellos una vez más. Todos sabemos por qué usamos estas dos cosas en el hogar, pero no se olvide de sus queridas mascotas.

Solución: limpie las patas y el vientre de su perro después de la caminata. Además, fíjate si hay arañazos o piel agrietada en las patas. Incluso si estuvo extremadamente atento y siguió cada paso de su perro, no puede notar dónde camina. Es mejor verificar dos veces, solo para estar seguro. En cuanto a los calentadores, asegúrese de que su perro no pueda acercarse demasiado para evitar las escaldaduras, especialmente si estamos hablando de las chimeneas.